INICIATIVA EDUCATIVA
ENSEÑANDO MORALIDAD CON RESULTADOS
Por todo Estados Unidos, los educadores de todos los niveles desde primaria hasta la universidad utilizan El Camino a la Felicidad para proporcionar una brújula moral para los estudiantes en un mundo de cambio y valores inciertos. Los maestros y administradores informan de caídas en la intimidación y otros actos de violencia cuando se implementa el programa, y un aumento de la responsabilidad, la confianza y las buenas costumbres.
“Creemos que este es un programa que cambia la vida y que puede mejorar la decadencia moral en nuestra sociedad, la comunidad y el país en su conjunto mediante la educación de las personas para tener una gran integridad. Hemos visto este programa como una herramienta que puede ayudar a reducir el crimen en nuestro país y hacernos mejores personas con un futuro brillante. Nuestra iglesia apoya totalmente esta campaña y los miembros del equipo de la iglesia están ansiosos por empezar a poner en marcha el programa en las comunidades, escuelas y sociedades”. — Pastor, Apóstoles de la Iglesia de Jesucristo, Johannesburgo, Sudáfrica
“Los vídeos de El Camino a la Felicidad tuvieron un profundo efecto en todos mis estudiantes, y el personal también. Fue un momento especialmente bueno para nosotros tener este programa ya que perdimos a un estudiante en un acto violento justo un día antes y siento que los estudiantes realmente absorbieron y aprendieron esto”. — Director de instituto, Estado de Nueva York
“Después de usar El Camino a la Felicidad con nuestros estudiantes las peleas, la violencia y los problemas han desaparecido, ha sido un cambio completo”.
“El Camino a la Felicidad te enseña las consecuencias de tus acciones. Entiendes las consecuencias de lo que haces. Te enseña la regla de oro. Yo solía oír hablar de ella, pero este libro la pone en perspectiva. Ahora sé lo que significa. Si la gente simplemente hiciera caso de este libro, El Camino a la Felicidad, la gente en general, si simplemente lo entendieran, lo cogieran y pensaran en ello, entonces el mundo sería un lugar diferente”. — Ex miembro de una pandilla y graduado de un programa juvenil usando El Camino a la Felicidad, Los Ángeles
“Con el apoyo de la Fundación de El Camino a la Felicidad, más de un millón de ejemplares de El Camino a la Felicidad se han distribuido en Palestina e Israel. Esto hace una gran diferencia. Puede jugar el papel de rehabilitar a ambos pueblos. El Comité Ministerial para el Mejoramiento de la Educación ha indicado a todos los consejeros escolares que enseñen a los niños palestinos usando El Camino a la Felicidad”. — Delegado del Secretario de Educación (Retirado), Autoridad Palestina
“Después de usar El Camino a la Felicidad con nuestros estudiantes, no hubo peleas, ni violencia y era una situación que había cambiado por completo en comparación con las dificultades anteriores”. — Director, Tel Aviv
“Frecuentemente remitimos a nuestros empleados al libro para ayudarles a resolver sus problemas personales. Francamente el libro es un factor que contribuye a nuestro éxito”. — Oficial de Entrenamiento Ejecutivo, California
“El Camino a la Felicidad es importante porque establece un marco que los jóvenes pueden seguir el resto de sus vidas. Están hablando de un camino. Están hablando de una oportunidad de comenzar a tomar algunas decisiones que pueden gobernar tu futuro. El Camino a la Felicidad es algo que cada superintendente se esfuerza por conseguir”. — Superintendente escolar, Ciudad de Nueva York
“Es realmente una guía de sentido común para vivir una vida productiva y feliz. Los retos diarios a los que nos enfrentamos a menudo parecen insuperables. Sin embargo, la honestidad y amabilidad son contagiosas. El compartir estas características hará de nuestro mundo un lugar mejor”. — Subsecretario del Ejército de Estados Unidos, Washington D.C.
En las áreas de inestabilidad, disturbios, crimen y violencia, hay un elemento básico en los problemas visibles: la disminución o ausencia de la moralidad. Por lo tanto, la distribución de El Camino a la Felicidad proporciona un código moral común con el que incluso facciones enfrentadas pueden acordar.
En las comunidades de Los Ángeles siempre acosadas por la violencia, las pandillas rivales se han unido bajo el estandarte de Unidos en Paz, el trueno continuo de cientos de motocicletas que traen un mensaje: cabalgamos por la paz.
En Ciudad Juárez, México, la ciudad estaba sacudida por 10 asesinatos diarios en 2010. Menos de dos años más tarde, después de que todos los hogares recibieran un ejemplar de El Camino a la Felicidad, la ciudad fue testigo de una caída del índice de homicidios de un 20%.
Desde la India y Tailandia a Venezuela y Guatemala, el impacto tranquilizante de la amplia distribución se ha observado una y otra vez.
“Nuestros hijos necesitan pautas y buenos ejemplos para que puedan aprender a respetar la importancia de los demás y, al hacerlo, respetarse a sí mismos”.
“Estados Unidos necesita el apoyo de organizaciones como la Fundación de El Camino a la Felicidad para ayudar a construir familias, barrios y comunidades más fuertes. Me complace que vuestro énfasis esté puesto en la importancia de establecer buenos valores. Nuestros hijos necesitan pautas y buenos ejemplos para que puedan aprender a respetar la importancia de los demás y, al hacerlo, respetarse a sí mismos”. — Exgobernador del Estado de Oklahoma
“Desde que las Cabalgatas de Paz mensuales de Unidos en Paz, formadas por clubs de vehículos y una variedad de grupos de la comunidad, han viajado a través de las comunidades del Gran Los Ángeles distribuyendo El Camino a la Felicidad, se ha producido una disminución subsiguiente y observable de la delincuencia en muchas de las comunidades que han sido alcanzadas por estas Cabalgatas de Paz. Reconozco y felicito a todos los individuos y grupos que contribuyen al movimiento Unidos en Paz, el cual ha impactado positivamente en las vidas de los ciudadanos”. — Miembro del Congreso de Estados Unidos
ASOCIACIÓN CON LA POLICÍA DE DELHI
INDIA
Rohit Sharma hizo entrega de miles de folletos de El Camino a la Felicidad en colegios de la India, creando esperanza y comprensión y un cambio en un entorno desafiante. En ese momento, el Comisionado Adjunto de la Unidad Especial para la Protección de Mujeres y Niños en el departamento de policía de Delhi reconoció el valor del programa y solicitó cubiertas personalizadas para garantizar que los beneficiarios supieran que este era su folleto cuando 10.000 ejemplares fueron entregados por agentes de la policía. Con la correspondiente caída en el índice de criminalidad llegó la demanda del Comando Central para capacitar a 500 agentes de policía en todos los aspectos del programa. El resultado: una asociación completa, con la policía de Delhi dando los seminarios en colegios y repartiendo folletos que indicaban “Entregado por la Policía de Delhi”.
“Colaboramos con El Camino a la Felicidad para crear una comunidad más segura, menos violenta”. — Departamento de Policía de Nueva Delhi
REGRESA LA ESPERANZA A
RUSIA
Con Rusia cargada con el índice de homicidios más alto de Europa y el índice de corrupción corporativa más alto en una lista internacional, el 55% de los rusos encuestados dijeron que sienten que no pueden hacer una diferencia sobre el crimen en su país.
Pero Evgenya Medvedík de Moscú dijo que está inspirada, no desmoraliza. Una propietaria de un negocio exitoso nombrada Empresaria Joven del Año, es ahora una defensora a tiempo completo de El Camino a la Felicidad. Ella y el personal de la Iglesia de Scientology de Moscú imprimieron ejemplares del folleto por miles, incluyendo cubiertas personalizadas para las empresas, y las repartieron a todo el mundo desde los estadios deportivos a la Plaza Roja. Los anuncios de servicio público se transmiten en pantallas grandes en los centros comerciales, en los cines, en la televisión y en el sitio web del grupo. Hasta la fecha, se han repartido 232.000 folletos y otros 4 millones de rusos han visto los anuncios de servicio público.
“El Camino a la Felicidad de la Comunidad de Estados Independientes está realizando una contribución considerable a la mejora de la moral de nuestra sociedad”. — Ciudad de Moscú
